No es la cueva más impresionante de todas, pero si vas con tiempo y estás varios días en la isla, es un destino que no puedes dejar pasar. Su mayor atractivo es una roca ceremonial que hay en su interior y de la cual aún se desconoce para qué fue utilizada y dos ventanas naturales que te permitirán observar el exterior de una forma increíble.
Si decides ir a esta cueva te recomendamos seguir leyendo este artículo para que te enteres de todo lo que hay que saber antes de iniciar este paseo.
Sobre la cueva Ana Te Pora
Ana Te Pora es un largo tubo, de unos 60 metros de profundidad y que fue formada, como todas las cuevas, por el paso de la lava por su interior.
Cuando estés dentro te encontrarás con un gran salón a metros de la entrada y una especie de cama rectangular formada con piedras.
Sobre esta cama, no se sabe muy bien para qué se utilizaba ni por qué está ahí. Si bien muchos creen que se usó para dormir, los historiadores y expertos dicen que los isleños dormían en camas de pasto, por lo que han descartado esta teoría.
La opción que más se difunde entre los investigadores es que este rectángulo se usó como un altar para los muertos ya que se encontraron restos y huesos humanos en el lugar.
Más allá de su verdadero uso y significado histórico, lo que sí podemos asegurar es que es un panorama increíble y que de seguro te sorprenderá cuando la veas. Es una conexión directa con el pasado y la historia de la isla.
Una vez pases esta especie de cama o altar, deberás seguir avanzando por un espacio bastante pequeño. Para proseguir será necesario llevar una linterna y agacharte, ya que las paredes se reducen desde su anchura y altura y el lugar se vuelve bastante oscuro.
Si sigues unos metros por ahí te encontrarás con una luz que viene del exterior. ¿Qué es esa luz? Es la otra entrada de la cueva, una a la que es mucho más complicada de acceder y que sirve sólo como ventana para ver a la salida.
¿Qué hacer una vez que llegues ahí? Tienes 3 opciones:
- Volver por el mismo lugar a través del que ingresaste. Esto significa llegar al final, observar la abertura y su vista hacia el mar y luego regresar por el mismo camino.
- Salir por la abertura. Esta opción es un poco arriesgada, ya que deberás trepar por las piedras y seguir un camino algo difícil.
- Por último, puedes ir al medio de la cueva (entre la entrada y el orificio de salida) y seguir un pasillo bastante oscuro que hay ahí. ¿Con qué me encontraré? Con un pasillo estrecho y oscuro que lleva a otra salida en un acantilado (esta es la opción más arriesgada y vertiginosa)
Estas dos últimas opciones son sólo opcionales. Si te devuelves por el camino a través del que llegaste, podrás disfrutar de igual forma la cueva. No es necesario arriesgarse para aprovechar este paso.
Consejos para visitar Ana Te Pora
Más que un consejo, nuestra recomendación para este paseo es que te informes bien del lugar donde está la cueva. La entrada puede ser un poco confusa y si vas sin ayuda puede que la pases por alto.
Dicho esto sumamos los datos que hemos entregado para las otras cavernas: usa zapatillas y ropa deportiva para pasar sin dificultad por el camino rocoso y lleva una linterna (puede ser la linterna del celular) para los lugares más oscuros de la cueva.
¿Cómo llegar a la cueva?
Ana Te Pora está muy cerca de la cueva Ana Kakenga (a unos 400 metros) y a unos 9 kilómetros de las ciudad Hanga Roa.
Para llegar a la entrada de la cueva deberás ir sí o sí caminando. Un auto te puede acercar al lugar, pero deberás dejarlo para luego caminar hacia tu destino.
Si decides hacer todo el trayecto a pie (sin auto) deberás ir rodeando el borde costero y seguir las indicaciones que te llevan a la cueva.
Puedes también tomar un tour con las agencias o nativos que se encuentran en la isla. Para nosotros es la mejor opción, ya que las cuevas pueden ser difíciles de encontrar y es un destino que no querrás perderte.
Sea cual sea la opción que elijas, deberás comprar con anticipación tu entrada al Parque Nacional Rapa Nui.
Este sitio es parte del parque y para acceder será necesario tener un ticket. Recuerda que si entras y no has comprado tu entrada, te arriesgas a multas y sanciones por parte de las autoridades de la isla.
Historia de la cueva Ana Te Pora
La verdad es que esta es una de las cuevas más misteriosas de toda la isla. Lo único de lo que se tiene certeza es que sirvió como refugio durante las guerras internas de las tribus, pero aún se desconocen muchos otros aspectos:
- ¿Para qué sirvió la cama que está en la entrada?
- ¿Por qué se han encontrado restos humanos en la cueva?
- ¿Qué relación tiene con sus cuevas cercanas?
Aún hay estudiosos tratando de descifrar todos los misterios, pero mientras ellos siguen en ese trabajo, nosotros seguiremos disfrutando de este regalo que nos dio la naturaleza.